sábado, 15 de diciembre de 2012

TLoZ

Paro unos, una simple saga de juegos más, para otros, una religion, quuizás para unos tantos sea un videojuego para pasar el rato; un amor de una sola noche. ¿En realidad, qué tiene La leyenda de Zelda?

Quizás sea la manera en la que Shiguero Miyamoto se robó nuestros corazones (o nos lavó el cerebro que es prácticamente lo mismo) los escalofríos que provoca Koji Kondo al escuchar sus más que hermosas y llenas de dedicación obras, el gameplay del que nadie se podría quejar demasiado, personajes con los que hemos pasado horas de risas, llantos, o pena ajena (Tingle, Tingle! Kooloo-Limpah) en fin, un juego que lo último que generaría es apatía. 

Para mi, ésto es más que un juego, y mucho más que "mi infancia" como afirmaría uno que otro amante del cliché.

No podría encasillarlo en una sola palabra, me limitaría demasiado. La historia habla por si sola.

Era por ahí del año 2000 cuando una niña de unos 5 añitos, o menos fue a casa de unos amigos cuyos nombres están difusos en mi memoria, pero lo que ocurrió, me marcaría de por vida. Éstas personas, tenían un nintendo 64, y estaban jugando "The legend of Zelda: Majora's mask". La imagen de la luna a punto de caer sse quedó plasmada en mi mente como un tatuaje.

Cabe mencionar que en mi familia es fácil encontrar amor por el terror, en forma de cine principalmente, o de literatura, como demuestran los muchos libros de Poe que forman parte de la colección de mi abuelo.

¡Tenía que saber más sobre ésa luna que cae! 

Unos años después de visitar las casas de mis amigos para jugar TLoZ al fin mi buen familia se apiadó de mi, y me regaló un gamecube. No era lo que quería (un 64) pero qué más daba, servía. ¿Qué? ¿Por qué quería un Nintendo 64? la respuesta es sencilla, en ésa consola solía jugar OoT y como dije antes; Majora's Mask. ¡Y no sólo éso! Era buena. A veces mis amigos sólo me invitaban a su casa para que les ayudase a pasar niveles que tenían dificultad. (¡Cómo olvidar ése sentimiento de estar perdido vagando por un templo sin rumbo alguno con un burdo mapa que sólo lo confundía más a una!)

Bueno, yo estaba muerta con mi GC. Luego conseguí la edición de colección que venía con varios títulos y ya estaba lista. Mi amor pot TLoZ ya estaba más que confirmado, y por ende, una estrecha afición a nintendo. 

Tenía mi Gameboy Color, verde, luego mi gameboy advance sp, pasando por mi DS. Fui una de las primeras (entre mis amigos, LOL) en tenerlo... qué va... adoro mis consolitas.

Sencillamete soy una chica nintendo. No es como que sólo tenga tíitulos de TLoZ , y tampoco los tengo todos, pero son como... mi mayor tesoro.

En serio, lectores, de la manera más humilde quisiera expresar en que manera atesoro mis juegos, mis pequeños discos, mi mejor card, mis cartuchos, al King of Red Lions, a Midna, a Navi, la Espada maestra, a los Gorons, a los Zoras, a las rupías que encontré regadas por todo Hyrule, ñas pesadillas ambientadas en Termina, las meolodías 8-bit de Link's awakening que no sólo se pegaban; se quedaban aderidas a tu cerebro de una manera casi malinga... en fin; gracias a Nayru, Din y Farore, a la sabiduría de Zelda, al poder de Ganon y el coraje de Link, por hacer mi vida feliz de una manera mágica y hermosa, y hacerme olvidar, por unos efímeros momentos, que el mundo es un lugar de lo mejor.

 En el nombre de Din, de Nayru y Farore, amén.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Para Mónica.

No me dejarán mentir, cuando les hablo de ésta mujer increíble. Una escritora fuera de lo común... En fin, uno de ésos entes maravilloso que echan andar tu imaginación cual papalote libre en la brisa.

Habrán pasado algunos años ya, cuando tomé un primer título suyo (Medio a la fuerza, medio por gusto) "Las princesa siemrpe andan bien peinadas". En fin, tanto fue mi encanto por ése libro, que se lo recomende a toda persona habida y por haber.

Poco tiempo después, si no es que en tercero de primaria, me topé con ella de nuevo, ésta vez con "¡Casi medio año!". ¿Todos los libros del barco de vapor tenían que ser tan espectaculares?

Y quién diría que en un cuchitril como lo es mi escuela actual, un MUY buen amigo mío me prestaría su libro "36 kilos", el cuál serviría únicamente para alimentar mi pasión por la escritura.

Hoy mismo, vengo enterándome de un título absolutamente hecho para mi; "Muchas gracias, Señor Tchaikovsky". ¿Qué más puedo pedir?
Afirmo con toda seguridad, que hay un antes y un después de leer éstos libros, nada ostentosos, pero divertidos a mpas no poder. Lo que marcaría mi deseo, o no, por convertirme en una escritora a la altura de ella. Con su dulzura, humor, creatividad y corazón.

Gracias, M. B. Brozon, por regalarme ratos inolvidables. 

sábado, 10 de noviembre de 2012

Nuestro amor brilla.

"Nuestro amor brilla" Después de ello, me tompo con fuerza y me dio un gran abrazo.

Admitiré que nos resta un camino largo y arduo que recorrer, pero es nuestro camino. Y nadie evitará que termines y salgamos airosos de ello. Los obstáculos en ésta vida estarán presentes, jamás pensé que estaremos exentos de éso, y gracias a Cthulhu que no.

Seguiremos creciendo, luchando, viviendo pero sobre todo; seguiremos amando.

Porque ésa es su naturaleza. Amar y vivir. No cualquiera ha recibido éste don tan extraño y maravilloso. Gracias a Cthulhu que una persona así es mi amigo, y mi pareja.

Gracias también a mi. A nosotros. A todos. A nadie.


jueves, 8 de noviembre de 2012

Demonios.

Camino entre el  rocío mezclándose con la escena, intentando fundirse entre las árboles de color dorado. Nunca había sido una de ésas personas capaces de mantenerse indiferente al sufrmiento ajeno, pero ella misma ya no sentía nada de amor propio.

Por primea vez en mucho tiempo, notó el frío que hacía, al camino destrozándole los descalzos pies, los terroíficos sonidos viajando a través del eco y sobretodo, comenzó a sentirse  débil.  El amor no la llenaba de un sentimiento de alegría, y lo último que se sentía en éste momento era todo poderosa.

Un festín de sentimientos negativos la consumía, y sabía lo que iba a costarle.
 No tardarían mucho en  llegar a ella.

El camino nunca había sido más largo, con cada paso que daba, se paralizaba un poco más su corazón. Sabía que nadie le daría la bienvenida, pero no le importó.Aún quería ir a casa, a dormir acurucada y escuchar a su familia como no había hecho antes.

Antes si quiera de llegar a medio camino, los escuchó venir. A los demonios. Era un desastre inseguro, su corazón sería un excelente buffet de dolor, depresión, soledad y miedo. Era el final. La princesa sería comida por demonios, y nadie haría nada.

O éso podrían creer.

Justo cuando el demonio iba a alcanza su capa (¡Ésa capa que siempre la acompaña!) Ella se esfumó. Simplemente ya no estaba en la posición de antes. Con un giro de tronco entero, y un grito de guerra como sólo se puede escuchar en una persona movida únicamente por la pasión.

El golpe que le soltó a la creatura grotesca fue tremendo. Estaba claro que no iba a dejar que sus fantasmas la consumieran otra vez.

La creatura volteó anonadada, no tenía idea de cóm reaccionar. Soltó un zarpaso que la hubiera alcanzado, si ella fuera una persona normal. Mientras la Princesa corría con cierta torpeza cargando una espada que casi igualaba su estatura, dejaba tras de sí un rastro de plumas blancas.

El demonio no tardó demasiado en cansarse de ésa molestia, y en realidad, tenía más de una herida severa que en un rato, no le dejaría seguir luchando. Soltó un rugido, en extreño agudo, y penetrante. Petrificó los movimientos de la joven, y en el descuido, escapó de la escena. La princesa se quitó las manos de sus oídos y buscó a su alredor, pero no vió a nada ni nadie.


"Bueno, al menos soy capaz de defenderme por cuenta propia." Dijo para sí misma, y se rió. ¿De qué se reía? Nadie sabe.

Se hincó en la hierba, son enormes lágrimas bajando por sus mejillas, acto seguido se recostó, haciéndose bolita. "Yo tampoco necesito de ti".

miércoles, 8 de agosto de 2012

09/08/12

Reinauguro  el blog. 

Fin.

sábado, 7 de abril de 2012

GRAND FINALE

La princesa cisne no podía dejar de llorar.
Le dolía tod, y su rostro estaba en una impresionate mueca de dolor...
Lloraba y lloraba.
Luego un disparo.
Sangre en su vestido blanco.
Y luego; nada.

martes, 20 de marzo de 2012

Bromas pesadas del tiempo y el espacio.

¿Y ahora qué?

¿Qué se supone que hago en esta clase de emergencia? ¿Corro en dodecaedros? ¿Maldigo tu nombre? ¿Voy a buscarte? ¿Lloro otro río?


¿Vuelvo a deprimirme?


No sé cómo haz vuelto a entrar, o el porqué de est jugarreta cruel de la vida, pero, si te sobrevivo ésta vez, si lo consigo al son de ls nots del Réquiem para la princesa, habré de seguir.


Pero si no...

sábado, 25 de febrero de 2012

Alguien que se ha ido

Con los ojos azules bien abiertos, Lía suspiró profundamente. Estaba sudando mucho al tiempo que  jugaba con su cabello.  El cuerpo le temblaba entre escolofríos y violentaas convulsiones provocadas por el hipo. En serio ya no sabía qué hacer. 

¿Cómo podías amar a alguien a la fuerza? Esto no parece algo posible... ¿o sí lo es?

El extraño ser soltó otro gruñido que hizo saltar a la joven y derramar una espesa y enorme lágrima. Era joven y feliz ¿por qué las cosas malas y bizarras siempre le ocurrían a la gente joven y feliz?

Intentó caminar pero el espírito le enseñó los afilados colmillos y escupió algo que bien podría haber sido sangre. Lía se congeló del miedo y se abrazó a sí misma.

"Entonces, bella joven ¿qué dices?" Vociféro el repugnante espíritu haciendo una mueca que probablemente era traducida en una sonrisa humana. Su voz era como escuchar a un bebé llorar, un violín muy desafinado, a tu novia histérica armar una escenita púlica y a tu madre llamarte por tu nombre completo, todo al mismo tiempo. Tenía una postura que le daaba un aspecto entre amenazaador e hilarante. Su fisonomía (si es que así podía llamarle) era gotesca. La grande cabeza calva en algunas partes estaba arrugada y tenía dos enormes ojos que veían sólo con una diminuta pupila. Su naríz era mas o menos humana y su cara, afilada y en los huesos la hacía parecer pequeña, lo m´s desagradable era su boca, llena de dientecitos afilaados y con dos largos colmillos hacia arriba, como los de un jabalí y llenos de sangre.  Su torso estaba en los huesos también y sus manos retorcidas como en una artritis extrema terminaban en largas uñas amarillas y sucias,pero no garras. Extrañamente su estómago estaba inflado a lo grande, como si estubiese embarazado pero de una cosa Lía estaba segura, fuera lo que fuera esa abominación, no podía embarazarse.  Al final, sus piernas era huesudas y estaban retorcidas con largas uñas en los cómicos piececitos, dándole un aspecto anfibiesco.

En realidad, esa cosa era repugnante y a Lía no le agradaba en absoluto que estubiera en su habitación, mirándole y amenazándola a mitad de la noche y en día de escuela.

En silencio ambos esperaron al otro, ella a que se fuera y ése bizrro visitante a que Lía lo invitase a quedarse.

Para siempre.

martes, 14 de febrero de 2012

¿No era ése el final?

La calida y tenue luz de la lámpara que estaba en la mesa al lado de su cama estaba brillante como nunca, y el suave murmullo del fuego era relajante. No se escuchaba nada más aparte de la tímida respiración de la princesa cisne.

Abrió lentamente los ojos, se frotó la cara con las manos, se sentó en su cama y se estiró como cisne, a fin de cuentas, le gustaba extendes sus alas.

Sus alas.


Dió un brinco ¿qué le había ocurrido? Un halo de luz, como alas cubría parcialmente sus brazos.


¿estaba transformandose en cisne? ¿Al amanecer?


Luego dió un salto. Su último recuerdo, en la fría y cruel nieve teñida de rojo era todo lo que tenía. Estaba segura; no había regresado a su cabañita en el bosque por su cuenta, entonces ¿cómo lo había logrado?


Su punk. Pensó y sonrió ¡Sí había ido tras ella a salrvarla y procurarla!


Animada se levantó y buscó su capa negra, pero no estaba, alguna de sus pertenencias, pero se las había llevado todas, una nota; y tampoco hubo suerte. ¿Su punk al fin agradecía el anonimato?


De pronto, escucho pasos en su cuarto de  piano (el cual había sido llevado por ella misma con un hechizo de fuerza y la ayuda de Friedich; un mayordomo y gran amigo el cual prometió mantener su secreto) y decidió averiguar si los animales aún estaba ahí, pero al entrar no encontró los ciervos de siempre, ni al punk de siempe. La sorprendió su visitante.


-Su majestad, al fin despertó. Son buenas noticias.

martes, 7 de febrero de 2012

El epílogo que deseaba serlo, pero que no lo fue.

Ya no llevaba la nueva capa, llevaba la capa que tomó de su castillo en el lago, la que no la cubría toda y que no era totalmente negra.

Traía puesta la capa con la que sentía perpetuo frío, la que usó cuando se lanzó al bosque lejos de todos los lujos que poseía. La que usó cuando se escapó del filósofo.

Estaba huyendo otra vez, estaba arrastrando los pies.

¿En qué momento había empezado a nevar?

El cabello con brusquedad se le pegaba a la cara, dándole golpes leves, casi olvidando que en realidad, ella era LA princesa y que no deberían tratarla sin cuidado. Corrió, con el único pensamiento de "Quiero escapar de aquí".


Era tan cobarde como el filósofo, entonces quería huir, así como había hecho él al abandonarla.

Tenía miedo de sus problemas, ya no quería enfrentarlos. Se consumía en sí misma y padecía de un dolor insoportable. Quería tomar el camino fácil, ahora más que nunca.


De repente, cayó sobre la fría nieve, su vestido blanco apenas la cubría, los brazos llenos de heridas mancharon la nieve de rojo. Rojo sangre.


¿Luego qué hizo?


Tranquilamente cerró sus ojos, esperando la misericordiosa muerte, para recibirla como una vieja amiga.



viernes, 13 de enero de 2012

Episodio de maliciosa bondad.

La princesa y el punk caminaron entre la gente. Ella se sentía contenta de sostener su mano, y era encantador cómo se esforzaba él por tomarla con la mayor delicadeza posible.

Había perdido la costumbre de andar entre muchas personas. Desde que el filósofo se fue, sen encerró en ella misma y en su amado bosque acompañada únicamente por los animales que se cruzaran en su camino.

El, por otro lado, estaba sumamente acostumbrado a estar entre tantas personas, lo tomaba con naturalidad y tranquilidad. Esquivando con agilidad a las personas no podía evitar jalar un poco a la frágil princesa. Incluidas sus grandes zancadas comparadas con los pasitos de bailarina de ella, parecía ser que era aún más pequeña.

Ella estaba cubierta, aunque no con su vieja capa, traía puesta una negra, que la cubría totalmente. Usaba el gorro como precaución, porque no quería ser reconocida como la triste princesa cisne, aunque aún no sabía con qué reemplazaría ése título.

En uno de los grandes y apresurados movimientos del chico un pequeño niño que vendía calcomanías tiró su burda mercancía. Iba a continuar caminando, como él, pero no lo consiguió.

Tímidamente tiró de la mano de su acompañante y él, preocupado volteó a ver qué ocurría con su preciosa gema. Lo que miró lo hizo sentirse inexplicablemente feliz y enfermo.

Ella se había agachado a recoger los cosas, junto al niño. Ahí estaba, hincada en el piso, regalándole no sólo una moneda al pequeño, si no que también una de sus sonrisas. De ésas que brillaban como la primera luz de la mañana.

Terminando su buena y desinteresada obra, revolvió el cabello del niño y dijo adiós con la mano, y sonrió hacia el chico del que ahora estaba enamorada.  El la miró con sus claros ojos bien abiertos con una cara totalmente sorprendida.

Débilmente musitó " Eres muy buena"

Los dos se miraron como extraños y siguieron su camino tomados de la mano, sin pronunciar palabra, sólo saboreando el silencio y el momento que a ambos les metió a la cabeza la pregunta...

"¿Y si no soy suficiente?"